El pasado Junio las alumnas y los alumnos de cuarto año del Profesorado en Educación Primaria y Profesorado en Educación Especial del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica N° 89 iniciaron las prácticas de sus respectivas carreras, distribuidos en las escuelas de zona centro y sur del Partido de la Costa. Implementando así la primera instancia de ésta en el campo docente.
En una entrevista que mantuvimos con la profesora de Educación Especial Erika Garcilazo y el profesor de Educación Primaria Raúl Castro, quiénes están a cargo de las prácticas de cuarto año, nos detallaron cómo es el proceso metodológico de estas experiencias pedagógicas en territorio, por la mañana a contraturno del horario de cursada y a partir del siguiente cronograma: durante los tres primeros meses (de marzo a mayo) se preparan las planificaciones que en junio serán llevadas a cabo en los diferentes espacios educativos y finalmente en julio se produce la evaluación del desempeño en el territorio.
Los entrevistados nos comunican que para las residencias en los establecimientos educativos, las y los alumnos se dividen en pareja pedagógica y luego se distribuyen dependiendo de su zona de residencia, entre las diferentes escuelas: EEP N° 5 de Santa Teresita y la EEP N° 6 de Mar del Tuyú para las y los estudiantes de zona centro; La EEP N° 7 de San Bernardo, la EEP N° 8 de Mar de Ajó Norte, la EEP N° 10 de Mar de Ajó, la EEP N° 11 de La Lucila del Mar y la EEP N° 12 de El Silvio, para las y los estudiantes de zona sur de Educación Primaria. La Escuela Especial 503 de Santa Teresita y la Escuela Especial 501 de Mar de Ajó para las y los estudiantes de Educación Especial.

Finalmente nos detallan que la evaluación se realiza de manera integrada, a partir de la conformación de un equipo evaluador, compuesto por la docente del Ateneo o Didáctica, los profesores de la Práctica Docente y los maestros co-formadores que son los orientadores que están a cargo de las clases en las escuelas, quienes de manera conjunta (o interdisciplinaria) toman en cuenta la planificación y la práctica realizada por los alumnos en las aulas para evaluar el proceso.
“Damos cuenta que el objetivo para los futuros educadores está en la manera de llevar a cabo su forma de impartir el conocimiento, el principal desafío es salir de la estructuralidad, lograr un buen manejo de grupo, tener una llegada óptima a los alumnos. Lograr una enseñanza constructivista y alejarse de los métodos expositivos”, nos relató el profesor de Educación Primaria Raúl Castro.
En conclusión las y los estudiantes que pasan del Pupitre al Pizarrón deben lograr una enseñanza que sea inclusiva, con igualdad de oportunidades para las y los alumnos y darse por realizados si logran que estos se apropien del aprendizaje y lo interioricen de manera natural.
Nota realizada por Lucila Moessgen y Julio Moreira estudiantes de la Tecnicatura Superior en Comunicación Social para el Desarrollo.